Espanja

B3-kieli espanja

lippu.jpg Lukion espanjan kielen kurssit ovat kaikki valtakunnallisia syventäviä kursseja. Kurssit suoritetaan numerojärjestyksessä. Kurssit arvostellaan numeroin. Arvostelu pohjautuu kokeisiin sekä tuntityöskentelyn havainnointiin.

Liitteet:

La bandera de España

Titulares de El País

Kate Winslet debuta como cineasta: “No hay más directoras porque estamos ocupadas criando”

En una charla sencilla, cercana, resulta fácil entender por qué Kate Winslet es un tótem de la industria del entretenimiento. Mientras que muchos actores sonríen para la foto y se marchan sin mirar atrás, la británica Winslet (Reading, 50 años) se queda hasta casi perder el avión de vuelta a casa de cháchara con un grupo de periodistas al que —a algunos de años, a otros de apenas breves encuentros— conoce incluso por su nombre. Se acerca, abraza, pregunta por la familia, ríe con anécdotas, se saca selfis. El evento tiene lugar durante un pase de Adiós, June, su primera película como directora, con guion de su hijo mayor, Joe Anders, de 21 años (en realidad, Joe Alfie Winslet Mendes).

Seguir leyendo

Cultura en EL PAÍS

‘The Book’: el libro que explica cómo reconstruir la civilización tras el apocalipsis

El menú de apocalipsis disponible es hoy muy nutrido: amenaza nuclear, emergencia climática, tecnología desbocada, crisis democrática, auge del totalitarismo, y un largo etcétera. El imaginario dominante es distópico y resulta difícil dibujar un futuro apacible. Aunque hay gente que lo hace… al menos después del colapso de la civilización tal y como la conocemos.

Seguir leyendo

Cultura en EL PAÍS

Alberto San Juan: “Soy una mezcla entre un don nadie y una Norma Duval”

Alberto San Juan, en Madrid.

Alberto San Juan, periodista de formación antes que actor por vocación, invita a café en su casa. Da la dirección en un barrio del centro de Madrid y, al llegar, una, prejuiciosa, espera encontrarse el típico apartamento bohemio de artista. Frío, frío. Vive en un normalísimo piso de una gigantesca manzana de bloques cerrada a un patio interior con piscina, pistas de tenis y parque infantil al modo de las urbanizaciones de las afueras. Le comento mi sorpresa y me da la razón. “Esto, que podría ser la evolución de la corrala, de la vida en comunidad, es el mismísimo infierno de la clase media aspiracional”, se ríe. “Antes, vivía en un sitio que igual piensas que me pegaba más, pero eso sí que era un infierno para Max y nos mudamos aquí para que pudiera bajarse a jugar”. Max es su hijo pequeño, de 12 años, que lee tirado en el sofá del salón mientras su padre atiende a la entrevista en la cocina. De fondo, una lavadora a pleno rendimiento.

Seguir leyendo

Alberto San Juan, en un banco de la zona común de la urbanización del centro de Madrid donde reside.

"DESCLASADO" ALBERTO

Alberto San Juan (Madrid, 57 años) creció en el madrileño barrio de El Viso, hoy un distrito prohibitivo, hijo del dibujante Máximo San Juan y la periodista Pilar Guijarro. "Una vez, mi padre me dijo que al haber comprado un chalé en El Viso nos convirtió en unos desclasados porque, socialmente, nunca perteneceríamos a ese mundo, pero tampoco a ningún otro. Mis hermanos y yo nos perdimos la experiencia de barrio, pero, afortunadamente, tampoco tuvimos la de unos niños bien", dice hoy este actor que, antes de atreverse a explorar su vocación de actor, estudió y ejerció brevemente el periodismo, en el que, reconoce, cometió algunas pifias como llegar tarde o marcharse demasiado pronto de los sitios. Hoy, con dos Goya en su haber, y multitud de papeles en cine y teatro, donde también escribe y dirige, San Juan tiene en cartel La cena, una de las películas más taquilleras del año. No se queja.

Cultura en EL PAÍS

Louvre, una temporada en el infierno

El vigilante de seguridad se agarra la cintura, se sube el pantalón y arquea las cejas. Jane, una turista de 43 años, insiste. Vuelve a pedirle explicaciones. Ha invertido más de 150 euros y 13 horas y media de avión. Su familia ha llegado a París desde Texas y la visita al museo era el punto álgido del viaje. La guinda del pastel, dice ella juntando el índice y el pulgar. “Pues no abriremos”, intenta zanjar el empleado el lunes, primer día de huelga en el Louvre esta semana. Jane no se lo puede creer. Tampoco varios centenares de personas que hacen cola ―y ridículas posturas en un frágil equilibrio sobre las peanas de cemento para tomarse fotos― ante la pirámide que el arquitecto chino Ieoh Ming Pei diseñó en 1993 para modernizar el museo y agilizar la entrada de visitantes. Fue hace casi 33 años. Tiempos dorados. Desde entonces, todo ha ido a peor.

Seguir leyendo

La Mona Lisa, tras ser recuperada después del robo perpetrado por Vincenzo Peruggia.
Cultura en EL PAÍS